jueves, 3 de septiembre de 2009

Todo es.......II

Como comentario a mi última entrada, en la que decia que "todo es perfecto, todo es como tiene que ser" me has hecho una pregunta muy interesante y es que si al buscar la parte positiva de todo lo que nos pasa, aguantamos desconsideraciones o faltas de respeto o podemos llegar a inventarnos una parte positiva que no tiene aquello que nos está pasando.
En primer lugar me gustaría comentar que cuando yo digo que todo es perfecto, todo es como tiene que ser, no implica de ninguna manera aguantar desconsideraciones o faltas de respeto. Debemos de tener en cuenta que si nosotros respetamos a los demás, tenemos el mismo derecho a que nos respeten a nosotros, por este motivo, si alguien es desconsiderado con nosotros, se lo decimos con total tranquilidad, de una manera calmada y objetiva, pero al mismo tiempo preguntandonos a nosotros mismos por qué he necesitado que esa persona sea grosera, o nos trata con falta de delicadeza o con falta de respeto, y qué tenemos que aprender de esa situación nosotros.
Y aquí es donde resurge con más fuerza esta frase, porque con la pregunta (al principio cuesta un poco más, pero poco a poco cogemos práctica y es más fácil), vemos que es aquello que tenemos que modificar en nosotros para que no se produzcan esas situaciones (desconsideraciones, falta de respeto) y luego porque nos queremos en el mismo grado que queremos a los demás, les decimos a esa persona que ha provocado esa situación con todo el amor del mundo (porque nos está haciendo aprender) que no necesitamos que nos hable o nos trate de esa manera, que si nos dice lo que sea que le molesta o no quiere, con delicadeza y con amor, igualmente intentaremos cambiar nuestra actuación para evitar hacerle daño en otro momento, y que a partir de ahora nos gustaría una relación de igual a igual con ella, y no de castigo para cualquiera de las dos partes.
Por supuesto que hay personas que no entenderán nuestros argumentos, pero serán ellas las que elegirán no estar con nosotros, porque si no son capacer de relacionarse desde el amor, no querrán relacionarse con nosotros. Y como respetamos el libre albedrio de todas las personas, les dejamos que elijan aquello que desean y las dejamos marchar.
Mañana seguiremos con ver solo lo positivo....jejej
Un abrazo con toda mi alma, gracias por estar aquí

1 comentario:

flor dijo...

Aquí de nuevo,
Creo que el punto es "y las dejamos marchar" no te parece? Quizas el miedo a "y si se va" sea quien sea y de la forma que sea, hace que resistamos. Hoy precisamente he hablado de un tema similar, en el que unos padres aguantan carros y carretas de sus consuegros con tal de conservar a su hijo. No están en la situación de plantearse cual es el aprendizaje, por supuesto, pero me he dado cuenta, viéndoles en prespectiva, que quizas se sienten heridos por actitudes que ellos mismos profesan y no ven.
Es curioso lo dificil que es ser objetivo y reconocer en uno mismo ciertas actitudes que, naturalmente, no se proyectan en idéntica dirección o si, pero existen.
La necesidad de no perder "algo" que a lo mejor no se tiene, porque ya estamos hablando de la propiedad; hace que bajemos nuestra estima a niveles a veces insospechados.
Me gustaría que un día hablaramos de la propiedad mal entendida, pero mañana espero hacer algun comentario sobre lo positivo, que eso sí es positivo.
muchos muas